En este proyecto se planteó la formación de una gran facultad global, en la cual los alumnos podrán optar a una mayor diversidad en sus temáticas de tesis, podrán utilizar equipos experimentales de cualquier laboratorio de la red, y cursar asignaturas en cualquier institución asociada. La red presentada en este proyecto involucra en Santiago al Departamento de Física de la Universidad de Santiago de Chile y a la totalidad de los programas de Doctorado que se imparten en regiones, los cuales residen en el Instituto de Física de la Universidad Católica de Valparaíso, en el Departamento de Física de la Universidad Técnica Federico Santa María y en los Departamentos de Física y Física de la Atmósfera y del Océano de la Universidad de Concepción. Entre estas unidades ha existido una colaboración, en términos personales de larga data, que se formalizó y amplió con este proyecto. Adicionalmente participan asociados dos centros de investigación experimentales del mayor prestigio en la región: el Centro Atómico de Bariloche y el Instituto de Física de la Universidad de Campinas, Brasil.

Esta propuesta puso especial énfasis en Física Experimental y aplicada, para contribuir a formar los especialistas que lideren en el futuro la I&D en nuestro país.

Objetivos Específicos

• Incrementar la capacidad de formación de recursos humanos con énfasis en áreas experimentales y aplicadas de las ciencias física en el país
• Incrementar la presencia e impacto a nivel nacional de la física como disciplina de la ciencia
• Optimizar el uso del equipamiento de laboratorio, biblioteca y otros recursos del postgrado
• Mejorar la calidad de la formación doctoral y optimizar el uso de recursos humanos con capacidad para la formación de postgrado

Impactos y Aprendizajes reseñados al cierre del proyecto

* Se ha fortalecido ampliamente la colaboración e interacción entre profesores y alumnos de los programas de postgrado incorporados.

* Se han dictado alrededor de 80 minicursos y seminarios y tres Escuelas temáticas (en las áreas de Cosmología, Magnetismo y Física de Sólidos).

* Se ha avanzado en la instalación de una cultura de trabajo docente conjunto.

* La mayor dinámica generada por el proyecto en cada uno de los programas y la existencia de becas han favorecido el incremento de alumnos de postgrado.

* Gracias a las becas concedidas por este proyecto se ha permitido que 14 alumnos puedan dedicarse en exclusiva a sus estudios de postgrado. Uno de ellos terminó sus estudios a fines del 2004 y tres rendirán su examen de grado el año 2007.

* Se ha incentivado y apoyado a los alumnos para que realicen estadías de investigación en otras instituciones académicas, tanto nacionales como en el extranjero (Universidad Federal de Río de Janeiro, Universidad Libre de Bruselas, Universidad de Barcelona, Universidad de Zaragoza, Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid, Universidad de París, ente otras).

* Los alumnos tienen la posibilidad de participar activamente en una gran cantidad de charlas y seminarios organizados por las diferentes unidades académicas.

* Los Minicursos han ayudado a los alumnos a profundizar conocimientos en diversas áreas.

* Los alumnos han tenido grandes posibilidades de interactuar con profesores visitantes, enriqueciendo su formación y contactos.

* El proyecto permitió en la USACH la adquisición de cinco equipos: Láser Sintonizable estabilizado en frecuencia, Microscopio invertido de multitécnica luz transmitida y reflejada, Sistema de grabación digital, Sistema de microscopía de pico fuerza y un Electroimán. En la PUCV se adquirió el equipo Mechanical Dynamical Anslyser (MDA). La PUCV mantiene una colaboración con la USACH para la utilización de sus equipos SEM y XRD. En la Universidad de Concpeción se incorporaron dos equipos mayores: FTIR-PAS y radar HF marino, y en la U. Técnica Federico Santa María se incorporó un Microscopio efecto túnel (STM), las unidades electrónicas de control y procesamiento del microscopio, evaporador beam, transporte magnético lineal y bombas iónicas.

* El proyecto permitió y fomentó aumentos significativos en las plantas académicas y postdoctorandos, lo que ha incidido fuertemente en el número de publicaciones de las Unidades.

Podemos destacar aquí como lecciones positivas, el tomar conciencia de las ventajas que reporta la colaboración entre los programas, permitiendo a los estudiantes una formación más amplia en sus áreas respectivas. Por otro lado, el trabajo conjunto conlleva dificultades de coordinación y gestión que deben ser superadas. Asimismo se han evidenciado las dificultades para conseguir postdoctorandos o académicos que trabajen en el área experimental. Hemos pensado que la estrategia que debemos seguir en esta dirección apunta a la formación de alumnos en estas áreas, de forma de que sean ellos los que, posteriormente a una etapa postdoctoral, puedan incorporarse a diversas universidades del país. Un aspecto negativo fue la ausencia de un compromiso completo para el trabajo en red de todos los integrantes de cada unidad. Muchos investigadores tienden a ver estos proyectos como fuente de financiamiento para actividades de impacto sólo local. Esto debe ser resuelto en nuevas iniciativas.